Mujica-Cortázar

Mujica-Cortázar

Instalación sonora, Arturo Moya Villén, abril 2016

Duración: 34’42”

Obra creada para el Hard Disk Museum, un proyecto de Solimán López

Mujica-Cortázar en el Hard Disk Museum

La obra sólo se puede escuchar a través de las Live Sessions del museo. Para conocer la próxima exhibición visitar la página de noticias del HDDM

Mujica-Cortázar es el producto de la intersección de un discurso público y un discurso privado, los pronunciados por Pepe Mujica en el momento de la finalización de su mandato como presidente de Uruguay, y por Santiago Cortázar Vinuesa, persona anónima, a la que se le solicitó que produjera un relato sobre su propia vida. Ambos se relacionan a través de un dispositivo que oculta el sonido de Mujica, pero utiliza la amplitud de su señal para hacer audible el mensaje de Cortázar.* Oímos entonces el mensaje privado, animado por la intensidad de las palabras del público, que se manifiesta como una ausencia, deviniendo presencia fantasmal. La transmutación del discurso de Mujica en un silencio ventrílocuo, no hace sino anticipar el silencio al que estaba abocado desde su misma construcción, su vuelta al río de las voces anónimas.

La obra se pregunta por las conexiones, condicionamientos e interferencias que existen entre ambos tipos de discurso, y por la nivelación que nuestra sociedad opera sobre ellos para construir su propio relato, decidiendo los que merecen ser conservados y los que relega al olvido en el momento mismo en el que han sido enunciados.

Por otro lado, el discurso de Mujica, como todos los de despedida, sufre una enorme tensión ante el silencio posterior sobre el que se proyecta. Palabras que, con la misma intensidad, quieren perdurar y extinguirse. El silencio agudiza su voluntad de permanencia, a la vez que le otorga gran parte de su sentido.

El archivo digital aparece tensado de una forma semejante. En él conviven la pretensión de la inmortalidad, con una enorme precariedad. Cada archivo, particularmente aquél que se presenta como obra de arte, actualiza esa misma lucha entre la voluntad de permanecer, y su desaparición debida a la rápida evolución y obsolescencia de los formatos. En ese sentido cada archivo digital podría ser una despedida, un canto del cisne ante un final más o menos postergado. Mujica-Cortázar propone para el HDDM un archivo que encarna las tensiones entre la permanencia y la obsolescencia del discurso y del archivo, entre el mensaje y el medio que lo sustenta.

* Un seguidor de envolvente detecta el volumen y la cadencia de las palabras de un primer discurso y aplica esos valores, en tiempo real, sobre el segundo, de tal manera que sólo escucharemos el segundo discurso cuando haya sonido en el primero.

Mujica-Cortázar